Aprovechando los rayos de sol que nos han acompañado estos días, algunos de nosotros hemos querido hacer una visita a nuestros lavaderos. Después de un paseo desde nuestra residencia, encontramos un bonito lugar a las afueras de Viñuelas, donde siempre es un placer poderse sentar y respirar aire puro, contemplando su frondoso paisaje y escuchando el canto de infinidad de pájaros. Además pudimos recoger elementos de la naturaleza que después utilizaremos como material en nuestros talleres de manualidades de esta primavera.
Os invitamos a visitar Viñuelas y su entorno, ¡¡¡¡OS ENCANTARÁ!!!!